miércoles, 28 de octubre de 2009

Descubrimientos de último momento

Así se iba a llamar este post que iba a ser súper chistoso (se los juro), hasta que todo se fue a la mierda y no me acuerdo de nada y esta saliendo esta jodida basura de intento de post.

¿No les ha pasado que de estrés les duelan los hombros tanto que parece que ejercieran presión sobre ustedes y se quieren ir para abajo, como tirarse al suelo? Le daría entrada al impulso si viniera acompañado de mareos, pero como sé que no me desmayaré y me quedaré simplemente ahí tirada sin pretexto muy bueno (todo mundo estamos estresados, por dios), entonces me da un poco de pena hacer el ridículo a esa escala.

No es cierto que todo mundo está estresado. Y si sí, qué pinche pena me dan todos. Yo no quiero ser de esos. ¡¡Aaaahhhh!! ¡¡A la mierda el estrés de mierda!!

Hoy descubrí, mientras me duchaba (las reflexiones y descubrimientos más importantes de mis días los hago a la hora de la ducha), que me tengo que acostumbrar al "tripeo". SIEMPRE me tripeo, pero lo peor de todo es que me lo tomo muy en serio. Me pongo muy solemne frente al espejo/computadora/interlocutor y digo "No mamar, AHORA SÍ me está cargando la chingada" pero no es cierto, nunca termina de cargarme y sólo, tal cual, me tripeo. Pero creo que no sería muy conveniente dejar de tomármelos en serio porque entonces perdería yo mucha chispa de personalidad (de la tantísima personalidad que tengo, claro claro) y me quedaría sin amigos y novio.

Ayer tuve tres conversaciones de esas gordas. De esas que, a través del otro, reafirmas quién eres. ¿Quieren que les comparta el resultado de esas pláticas? (Jaja, para qué pregunto si de todos modos voy a hacer lo que me da la gana)

Primera plática "muy acá": sobre el amor (o, más en específico, sobre el matrimonio). Interlocutor: mamá de un gran amigo. Conclusiones/aprendizajes (todo parece obvio pero en el fondo se esconde la gran sabiduría de lo pequeño y escondido):
-Las peleas las hacen dos, no uno.
-La vida es un camino que se va a recorrer: el matrimonio/concubinato/relación-súper-seria, una forma de caminarlo acompañado.
-No hay que olvidar que el matrimonio es para apoyarse y no para nefastearse.
-Hay que ser respetuosos.
-Uno no se casa para ser feliz.
-Cásate enamorado, porque si el matrimonio eventualmente se va al carajo, al menos lo habrás pasado bien un tiempo.
-No hay que vivir el matrimonio como los demás digan, sino como tu espíritu lo dicte.
-Hay que ser flexibles (si tu pareja SIMPLEMENTE no lava nunca los trastes, no se los avientes en la cara/grites groserías... lávalos tú y ya)

Segunda plática: vocación de arte. Interlocutor: un gran amigo. Conclusiones/aprendizajes.
-Si la vida te dio un don/talento y es lo mejor (si no es que lo único) que sabes hacer bien y además te apasiona y te provoca dicha: HAZLO. No te distraigas.

Tercera plática (en realidad monólogo): oficio de escribir. Interlocutor: profesor de guión. Conclusiones/aprendizajes.
-(Dizque) soy apasionada, creativa y tengo buenas ideas, pero no me comprometo con mis proyectos porque soy insegura y demasiado autoexigente. Tengo que esfozarme para "no echar por la borda una carrera prometedora".

Yyy... ya me voy, porque además de que este post está súper ni al caso, me muero de ganas de hablarle por teléfono a mi novio.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Siempre lo he pensado y con este escrito lo reafirmo, eres una persona de quien resulta muy fácil enamorarse y eso recae, en parte, en esa capacidad que tienes de admirar. ¡Ojalá y nunca la pierdas!

Abrazos cálidos, que con este frillito no caen nada mal