lunes, 29 de agosto de 2011

Lux Boreal

A las once horas de un domingo que normalmente sería consagrado al descanso o a la familia, se transformó en mi caso en una maravillosa experiencia de diálogo con las integrantes femeninas del grupo de danza contemporánea, con sede en Tijuana, llamado Lux Boreal. Nos contaron (a mis compañeros del Taller de periodismo cultural y crítica de arte, y a mí) detalles íntimos sobre el grupo e incluso de algunos de sus miembros, su historia como compañía de danza, las vicisitudes que han atravesado y algunos datos escabrosos sobre su última puesta en escena, titulada Lamb (cordero, en idioma inglés).

Sobre los retos que se les presentan para acercar a los espectadores a la danza, nos mencionaron que “no es una tradición en la sociedad mexicana darle importancia al arte. La sensibilidad de apreciar el arte la tiene cualquiera, pero no la tenemos desarrollada”, según dijo Azalea López, bailarina. Victoria Reyes, por otro lado, nos puntualizaba que han hecho obras cortas para que sean fácilmente digeribles para un público no conocedor, y que parece que ha dado frutos, pues Lux Boreal es un grupo que los bajacalifornianos quieren y procuran. Briseida López, otra de las bailarinas, nos repetía aquello que todos (excepto los altos funcionarios del gobierno, pareciera) hemos oído infinidad de veces: “la forma más eficaz de acercar a la gente al arte es desde la educación de casa”. Además de haber creado el Diplomado de Danza Contemporánea y Producción Escénica Lux Boreal (con sede en Tijuana y actualmente en su sexta edición), que tiene como intención crear público para esta disciplina artística, los jóvenes danzantes han llevado las artes escénicas a las calles. “La gente le tiene mucho miedo a los teatros”, se lamentaba Azalea. Nos confesaron contentas que después de haberse presentado en la vía pública, aquellos espectadores espontáneos y desprevenidos después fueron voluntariamente a verlos a un foro o a un teatro.

Nos contaban también que una manera que han encontrado de renovarse constantemente y así mantenerse frescos es colaborar con distintos coreógrafos. Para “Scrabble”, la puesta en escena que pudimos disfrutar en el Teatro” Alí Chumacero”, fue Magdalena Brezzo, una reconocida coreógrafa de origen uruguayo, la profesional invitada para trabajar con ellos, junto con los coreógrafos Henry Torres y Ángel Arámbula. Este montaje habla sobre las obsesiones y miedos de cada uno de los bailarines, y su nombre se debe al modo en que los coreógrafos decidieron darle unidad al proyecto: tomaron el nombre de cada una de las partes en que los jóvenes bailaban sus monstruos internos y las combinaron de modo juguetón para crear un ensamble con ilación y sentido.

La pieza que pudimos ver el domingo 28 de agosto a las 20 horas en el recinto tepiqueño fue de gran colorido, de precisión en los estímulos y las sensaciones, de movimientos concisos pero elocuentes, de gran interacción entre los danzantes y entre éstos y la música y la escenografía. Un espectáculo que, desafortunadamente, duró menos de una hora pero que al final recibió una gran cantidad de aplausos. No es diario que los nayaritas tenemos la posibilidad de ver una pieza artística de este nivel: tanta pasión en escena, tanta disciplina. Prefiero los domingos consagrados al arte que al descanso, es un hecho.

1 comentario:

Azalea dijo...

Hola mandarina! Que placentero leerte y conoce tus impresiones sobre la deliciosa charla que tuvimos y sobre scrabble. Me gusta tu sencillez clara. Espero se repita. Un abrazo y son todos bien venidos a tijuana. Azalea.